Este faro ya no necesita ayudar a ningún marinero a encontrar su puerto o advertir a un barco sobre los peligros de un arrecife... ahora que todas las naves cuentan con complejos elementos tecnológicos que sirven ese propósito. Aún así, sigue vigilante cerca de la costa y se ilumina de vez en cuando.
Como esto, hay muchas cosas que realmente no necesitamos, pero que nos fortalecen y nos resultan familiares... esas cosas nunca pueden ser reemplazadas.
Creo que a ese hábito de tener cosas que no necesitamos se le podría llamar costumbre o nostalgia, pero algunas de esas ciertamente nos dan ese valor adicional a nuestras vidas.
ReplyDeleteUn abrazo,
Katmarce--
submarinopimienta.blogspot.com
Bonita palabra... nostalgia!
DeleteEstoy de acuerdo, hay que cosas que mantenemos con nosotros porque nunca pueden ser reemplazadas :-)
Un abrazo!
C.