Desde 1897 tenemos esta pequeña pastilla disponible y ahora no lo lograríamos sin ella: la humilde pero maravillosa aspirina.
Este es uno de mis ejemplos favoritos de las cosas pequeñas que provocan grandes cambios. Pueden imaginarse cuántas vidas fueron mejoradas o inclusive salvadas por esta pequeña maravilla?
Sin duda fuimos afortunados cuando el habilidoso Dr. Hoffmann logró aislar este químico en su laboratorio hace tantos años ya...
Por dicha en la actualidad contamos con muchas más maravillas de este tipo para mejorar nuestras vidas y disfrutarlas por mucho más tiempo.
ReplyDeleteUn abrazo,
Katmarce--
submarinopimienta.blogspot.com
Te imaginas un mundo sin aspirinas? Yo que soy usuario de esta excelente medicina no lo logro...
ReplyDeleteComo dices, es una fortuna contar con muchas cosas similares!~
Un abrazo!
C.